Cuando uno graba un cover, debe tener al menos el sentido de homenajear a su autor y para lograr ello tienes dos caminos:
por un lado, hacer una foto de la versión original, en ese caso te expones a ser comparado con los estándares de la banda creadora y, por otro, tomar el estilo de la canción original, mezclarla con el valor agregado del músico que interpreta y hacer un avance creativo sobre la obra.
En este horrible pedazo de cd trataron de hacer la primera, con desastrosos resultados.
A priori señalo que la producción de este disco es pésima, un horrible sonido de bombos, la mezcla de la voz denota un pésimo oído y nada más que un intento de generar unos vulgares dólares, mancillando el inmaculado legado de Queen.
El espanto comienza con una pornográfica versión de I want it all que, si bien la del disco The Miracle tenía un molesto sobretrabajo ingenieril en los arreglos (y en la pésima inclusión de teclados), esta versión destruye lo hermoso de la original. De hecho en el clásico de Queen, si quitabas los melosos teclados y el desagradable sonido del metronómo, yacía un impecable himno rockero. Éste excremento sónico llamado Impelliterri destruye uno de los mejores solos de Brian May y, en vez de potenciar los poderosos riffs originales, se privilegió un solo shredder que es inadecuado como yo con pelo largo. Y, como si esto fuera poco, una horrible vocalización melosa, nasal, de esas que me dan ganas de regalar un tímpano nuevo al homicida que permitió que ese sujeto cantase.
Post viene el segundo espanto, una inferior versión de Sheer Heart Attack, que carece de la potencia hardcore pre sex pistols de la original, sonando con calidad de demo de Shrapnel, cantado además por el insípido James Labrie que, como siempre, no aporta, políticamente correcto. Si no hubiese sido por el excelente aporte de Marty Friedman esa pista la hubiese socavado con una gubia.
Another one bites the dust, es tan insípida, tan mínimo común denominador, que no debiese, siquiera en este contexto, haber sido incluida. Los solos de Petrucci no hacen sino evidenciar el mal gusto del productor al escoger a los ejecutantes de los covers.
Al fin con Save me, aparece una EXCELENTE versión, quizás tan buena como la original. Jeff Scott Soto se luce como un metal god que es, parece que este temazo del disco The Game hubiese sido compuesta para él. Sus mestizas cuerdas no hacen más que enriquecer la emotividad de esta canción. Mención aparte los majestuosos arreglos de Bruce Kulick, ojo, se nota demasiado la sapiencia y experiencia de ciertos músicos en comparación con el virtuosismo barato y simpleza artística de otros.
We will rock you y We are the champions son los peores covers cornetas jamás paridos en el rock and roll, no debiesen haber sido grabados ni con amenaza de castración intestinal. Lo único bueno es el gran solo de dios Robby Krieger (The Doors, para Uds., ochenteros ignorantes) al final de We are the champions.
La segunda excelente versión aparece con Tie your mother down, pero claro, tienes a 4 colosos tocando: Lemmy, Ted Nugent, Tommy Aldridge y Rudy Sarzo. Captaron a la perfección el espíritu de la canción y lo adaptaron a sus estilos. Aldridge toca como un demonio y Lemmy, como siempre, no arruga.
Get down make love, es como diría Charlie Badulaque: “parejito”, salva, Jake E.Lee hace un interesante solo, pero es la sobrecargada vocalización de Glenn Hughes la que satura mis oídos como una abeja con drifteria. Me dan ganas de decirle: “Si todos sabemos que cantas….. bonito”
Luego viene una versión de Keep yourself alive que, si no tuviese solos y se hubiese escogido a un vocalista con un tono agradable, sería una versión pateaculos.
Yngwie Malmsteen jamás ha tenido, después de Marching Out, gusto a la hora de tocar un solo, debe ser el Andre Rieu o la Vanesa Mae del metal, creen que incorporar Bach, Beethoven y Paganini al metal tachuelero es artístico o “culto”. Por lo que esta canción del disco homónimo de Queen (que por lo demás, la original es un bodrio) se ve fuertemente afectada por la parte de lead guitars, pero evidentemente mejorada en el groove y los riffs asesinos del guataca “chasca Cher”, que es donde no hay nada que criticarle. Por favor, que alguien le haga un September 11 a Mark Boals… quién sigue comprando sus discos?? o, peor aún, quién se los edita por Dios!!.. si es horrible, es un mal Klaus Meine (que ya me cuesta digerirlo), por favor si los asesores de Míralo ehh Míralo eeehh Malmsteen leen este review, devuelvan a Jeff Scott Soto ASAP.
Después de estas simpáticas excusas de música, viene el peor cover de la historia: One Vision.
Yo pensé que el cover de Sweet child o´mine por Sheryl Crow o el de Reign in Blood por Suede eran rectales, pero esto es beyond belief. No entiendo como un pedazo de guitarrista que es Bruce Boulliet, participara en estos 4 minutos de anti música. Skip it como el cólera.
Cuando mis esperanzas de justificar las 15 lucas que pagué hace 9 años por este moscorrofio de Cd, se habían ido al dicom de las termas internacionales, aparece una gema en el vertedero. It´s Late, de Ánthrax, da cátedra de cómo hacer un sólido cover. Captura la esencia de este temazo de News of the World, y lo almidona con el sonido neoyorkino hardcore trashero y los potentes riffs de Scott Ian.
En síntesis, si no fuese por Motorhead, Anthrax y Jeff Scott Soto, este tributo debería adornar las ofertas de COLT70.
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